Lluís Roura, la llum de l'Empordà

 

Ahir al vespre plovia i tot feia pensar que perillaven els actes previstos per donar el tret de sortida a la Festa Major de l'Escala. Aquest any n'era el pregoner una persona ben especial, el pintor Lluís Roura, conegut com "la llum de l'Empordà" pels seus magnífics paisatges de camps florits i natura en essència.

Just a l'hora prevista per la seva compareixença al balcó de l'Ajuntament, la pluja ens va donar una treva, però llavors vam haver d'esperar a que fessin la seva actuació de la Street Band Damm-er, que va entusiasmar a grans i petits, amb la seva energia i el seu ritme imparable.

La pluja es va cansar d'esperar en Lluís i va tornar a caure sobre el munt de persones que ens havíem aplegat a la plaça de l'església i van començar a obrir-se els paraigües, de tots colors i mides. Va ser bonic de veure, gairebé un instant poètic. La gent es va mantenir dreta, desafiant el mal temps, expectant per escolar el seu pintor més estimat. La pluja aquest cop es devia intimidar, perquè queia amb timidesa, devia tenir por de molestar la gresca que es respirava a l'ambient i no va gossar acabar d'aiguar-nos la festa.


Quan en Lluís va començar el seu pregó, ho va fer amb força, queixant-se de les ulleres com un dany col.lateral del fet d'anar fent anys. Ens va explicar que no s'esperava l'honor de fer el pregó d'aquest any perquè ell no és fill de l'Escala. Ell va nèixer a un poble del Pla de l'Estany, Sant Miquel de Capmajor. La primera vegada que va sentir anomenar el poble de l'Escala devia tenir uns set anys, un dia sortint de missa, quan el campaner va anunciar que el millor peix era el que arribava de l'Escala. Temps més tard, amb quinze anys, va trepitjar l'Escala per primera vegada i va fer el seu primer dibuix d'unes barques a la Punta.

La seva infantesa i adolescència van transcórrer al món de pagès, entre els animals i els camps de conreu. En aquell ambient se li va despertar la passió pels paisatges, pels colors, per la llum que la natura emana. L'any 1963 va marxar cap a Barcelona, buscant més camp per explorar al món de la pintura i al 1970 va fer la seva primera exposició.

Abans d'establir-se a l'Escala al 1990, havia viscut un temps a Pont de Molins, on la seva germana feia de mestra, i també a Vilabertran.

La tardor- Lluís Roura


Persona d'una creativitat incombustible, mai no ha deixat de pintar, ni d'escriure, ni de meravellar-nos amb les seves fotografies que realitza dels paisatges de l'Escala dia sí i dia també, a l'espai del temps a TV3. La Columna emporitana de la rotonda de l'entrada de l'Escala és obra seva en col.laboració´amb l'Armand Olivé-Milián, igual que ho són, també, la de la rotonda de Vilatenim, anomenada Miratge empordanés, el mosaic circular que representa el Pla de l'Estany a Mata i el mosaic de Les Quatre Estacions de Massanes, a la comarca de La Selva.

Honorat amb la Creu de Sant Jordi i amb molts altres premis, en Lluis Roura també té exposada de forma permanent part de la seva obra a les esglésies de l'Escala i Banyoles.Home profundament espiritual, ha pintat paisatges de Terra Santa i ens ha regalat uns camps de l'Empordà com ningú abans havia gosat pintar-los.

El pintor de la llum, ahir al vespre, va saber aturar la pluja per tal que poguessim gaudir del meravellós regal que ens esperava a la façana de l'església, un cop va concloure el seu pregó. Només vam haver de girar-nos per gaudir fins a les llàgrimes d'un univers únic.

Fragments del Mapping Lluís Roura. 80 anys de memòries
Creació de Lisa Derksen Castillo.
Organitzat i patrocinat per l'Ajuntament de l'Escala.


Mil gràcies, Lluis, per existir i per deixar-nos la teva llum per aprendre a apreciar un món més bonic.


Estrella Pisa.


Comentarios

  1. Miguelángel Díaz31 de agosto de 2025, 10:41

    ¡Qué emocionante, Estrella!
    Nos has capturado la esencia de las localidades donde el calor entre sus habitantes sigue presente y transmite emoción. El valor de la obra de Lluis Roura lo has mostrado en su humanidad y en esa muestra pictórica que acompaña tu publicación. Felicidades a ti y a todos tus paisanos, especialmente a Roura.
    Un enorme abrazo :-)

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    Respuestas
    1. Estrella Pisa31 de agosto de 2025, 12:29

      Muchas gracias, Miguel.
      L'Escala siempre me ha hecho sentir en mi casa. Ha sabido conservar su esencia de pueblo de pescadores y ha inspirado mucho arte, tanto en literatura, como en pintura y en música. Quizá su hija más ilustre haya sido Caterina Albert (Victor Català), pero muchos otros han llegado de otros lugares y han decidido quedarse, como el propio Lluís Roura y como hicieron otros mucho antes, como el fotógrafo Josep Esquirol, quien fotografió l'Escala anterior a la Guerra Civil y documentó las dos primeras décadas de trabajos arqueológicos en Empúries.
      Un abrazo enorme.

      Eliminar
  2. Marcos18 de septiembre de 2025, 7:24

    Me ha encantado, Estrella. Capturas un instante mágico bajo una lluvia tímida que, como intimidada por la presencia de Roura, no osa interrumpir la celebración, mientras la multitud se mantiene expectante con paraguas de colores que crean un “instante poético”. Describes la vida de Roura con una admiración que resalta su conexión espiritual con la naturaleza y su capacidad de capturar la esencia de l’Empordà en paisajes y fotografías. El clímax, con Roura “deteniendo” la lluvia para revelar un espectáculo en la fachada de la iglesia, me deja emocionado, transformando el pregón en un acto de comunión colectiva. Este relato brilla por su atmósfera festiva, su reverencia por la creatividad y su habilidad para convertir un evento local en una celebración universal de la luz y el arte, dejando un eco de admiración gratitud por la capacidad de un artista para iluminar el mundo incluso bajo la lluvia.
    Te felicito.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estrella Pisa20 de septiembre de 2025, 1:36

      Muchas gracias, Marcos.
      Tu comentario me ha emocionado, igual que lo hizo el mapping sobre la vida y la obra de Lluís Roura.
      La vida son momentos. A veces tenemos la sensación de que son pocos, pero es porque vamos en piloto automático y dejamos pasar de largo demasiadas cosas, sin darnos cuenta de que con ellas se nos escurre la vida que, inconscientemente, decidimos no vivir.
      Si fuésemos capaces de detener nuestra prisa insensata y de escucharnos un poco más, quizá descubriríamos que tenemos más suerte de la que creemos y que la vida puede regalarnos muchos más momentos mágicos, simplemente, dignándonos a mirar con otros ojos todo lo que nos pasa por delante.
      Un abrazo enorme.

      Eliminar

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